10 años de "Pasión en Sevilla"

Decía Núñez de Herrera que es imposible escribir la Semana Santa, y la revista Pasión de Sevilla, en diez años de vida, en cien números publicados, ha intentado encorsetar en palabras algo tan profundo e indomable como es la Semana Santa. En las páginas de esta revista uno encuentra belleza, sosiego, jirones en forma de miradas que cada mes se entreabren un poco más como la herida de la fe, el motor que mueve en definitiva todos nuestros latidos, sanándose poco a poco cuando algunos de sus lectores le ponen el punto y final a la lectura de cada artículo.

Desde el "Primer Tramo" de Paco Robles a las "Cien Palabras" de Antonio Cattoni, uno ve desfilar ante los reflejos de nuestros ojos toda una cofradía de emociones e historias que nos permiten entender que Dios es grande, que su Madre lo es aún más, y que a los dos les gusta pasearse de la mano por una ciudad que tiene adoquines de barro y que pinta primaveras de purezas sobre el sueño de los almanaques. Cada mes, uno puede encontrar ecos de poesía, esbozos de pintura, recortes de infancia; las confesiones, los secretos y los recuerdos del ayer se reflejan en el rostro de decenas de dolorosas; las devociones, las promesas y las leyendas de papel son reveladas con medio susurro de campana, dejando bordado en nuestra memoria un silencio que algún día lo contará todo. Cada colaborador aporta el reverso de sus escalofríos. Cada fotografía es un lienzo del alma de su autor congelado en un segundo del tiempo. Cada número es un regalo coleccionable digno de la mejor colección numerada.

Pasión de Sevilla cumple 10 años. Un trabajo arduo, profesional y estricto que hoy me van a permitir que aplauda, deseando que la Esperanza sea la veleta que siga dirigiendo los pasos de estos compañeros hasta el camarín de nuestras miradas, que el trabajo que desarrollan mes a mes siga exhalando escritos de manera permanente y continua y que el Señor que viste de malva acune cada una de estas generosas caligrafías y guiños bajo la zancada poderosa de su bondad infinita. 

A por otros diez años. Muchísimas felicidades.