Ante la Virgen, un año más

Jerez ya está en El Rocío de manera oficial. A las cuatro y cinco de la tarde llegó este sábado a las puertas del Santuario tras esperar más de dos horas en las calles Bellavista y Muñoz y Pavón, donde como cada año se alcanzó el éxtasis rociero que siempre resurge al paso de la carreta de plata del Simpecado.

Fue un éxtasis que llegó a lomos de las sevillanas de siempre, las caras de casi siempre y el ambiente de casi siempre también. Una explosión de euforia colectiva sólo conocida aquí en esta jornada sabatina de vísperas de Pentecostés, cuando todos participan de una amistad colectiva que de durar doces meses completos, nos haría mejor pueblo sin duda. 

Fue más allá de la una de la tarde cuando el banderín de camino arribó a la zona de la marisma que linda con el inicio de nuestro recorrido. A partir de entonces, recepciones alegres en las casas que llevan firma jerezana en forma de peñas: Viejo Simpecao, Pastorcito Divino, La Ponderosa, Manuel Valderas, Sopetón, Retales, De la Albarizuela al Rocío, Romero Verde, El Quema... etc. 

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Y todo con el epicentro de la Virgen esperándonos en la Ermita un año más. No hay meta más bonita. Más pura y también más necesaria. Año nuevo del rociero. Alfa y Omega de todos nuestros pasos, aquellos que comenzaron el pasado miércoles en Santo Domingo.

Jerez ya está en El Rocío. Esa es la noticia, aunque las ausencias dolorosas de los que nos faltan, nos hicieran sentir punzadas amargas en muchos momentos del mediodía.

Ahora a disfrutar de las horas de la romería y a esperar que el Lunes volvamos a encontrarnos con la Virgen a la puerta de nuestra casa de hermandad.

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¡Viva esa Blanca Paloma!

 

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