Crónica del Domingo de Ramos

Alegría en los rostros y ganas de comerse el mundo, fueron las notas predominantes durante la mañana del Domingo de Ramos. Lucía el sol, sueño deseado, y salvo el frío, que ya se quitaría con un abrigo, todo hacia presagiar que por fin estábamos ante las puertas del gozo. Pero llovió. A eso de las cuatro y media. Y todo se fue al traste. Era una lluvia a traición, por sorpresa, que al final no destrozó la jornada.. pero que la puso patas arriba.

Porque entonces, hubo quien quiso esperar un cuarto de hora, y después media hora, y después una hora entera, y hubo quien no quiso esperar, y hubo quien preguntó y volvió a preguntar.. y no hubo una decisión en firme que dijera "esto es lo que hay". Es decir, que un año más, estamos ante una Semana Santa sin dirección, en la que cada uno hace lo que le da su real gana. Y punto. ¡Viva yo y nadie más que yo!

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Y claro, con esos mimbres, aunque después hubiera consenso en atrasarlo todo 45 minutos, lo normal es que pasara lo que pasó. Que todo fue muy bonito -aunque frío-, pero absolutamente deslavazado, y lo que es peor, carente de respeto hacia quien siempre sufre todo esto: las últimas hermandades del día, Coronación y Angustias, que como en los viejos tiempos, tuvieron que sufrir los retrasos que metió de manera despiadada, la Hermandad del Transporte. Intolerable.

A todo esto, metan ustedes en la cocktelera del día, que era el del reestreno de una Carrera Oficial, absolutamente deficiente y arcaica. Pregunten a quien ayer la sufrió, desde dentro y desde fuera, a ver qué  les responden. Bullas, empujones, carreras, cruces apretados.. una auténtica vergüenza.

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Ahora, eso si. Los pasos geniales. Las bandas, geniales. Los momentos, geniales. Pero todo queda en un segundo plano, si nos empeñamos en mirar para otro lado refugiándonos en la 'ojana'. Lo de este año es un paso atrás como no se recuerda en la Semana Santa de Jerez. ¿Qué la Coronación por Bizcocheros, o la Estrella en Tornería, o el Perdón o El Transporte por Carpintería, o Las Angustias en San Miguel.. fue maravilloso? Si. Genial. Pero no. Así no podemos seguir.

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