Este domingo pasado, mi párroco, don José Luis Repetto, hizo referencia en su homilía al papel de nuestro Obispo como cabeza visible de Cristo en nuestra diócesis.Se refirió a la manera en que debía ser tratado y que muchos no hacían. Monseñor Mazuelos es nuestra máxima autoridad diocesana y como tal tiene un tratamiento que muchos desconocen y por ello hoy voy a intentar explicar brevemente cómo debe ser tratado.Siempre a un Obispo se le habla de usted y con el tratamiento de Excelentísimo y Reverendísimo Señor, procuremos saludarle de la manera más protocolaria posible a pesar de que en el caso de nuestro querido vicario es una persona sencilla y afable. Cuando nos referimos a un Obispo siempre ponemos delante de su nombre y apellido el vocablo “Monseñor”, en nuestro caso concreto, sería Monseñor José Mazuelos.Por todo ello, al saludarle debemos realizar una pequeña inclinación de cabeza acercándola a su mano y se hace ademán de besarle el anillo mientras realizamos una ligera inclinación de la rodilla derecha.
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Otro asunto que considero de absolutamente irrespetuoso, verter criticas públicamente sobre la figura de nuestro vicario, puesto que como cristianos debemos obedecer y aceptar las decisiones y nombramientos de nuestro Papa. SS Benedicto XVI, cabeza visible de Cristo en la tierra.Después de hablar sobre el Obispo, debemos tener en cuenta la figura de los sacerdotes, a los cuales les debemos un respeto y trato puesto que son pastores encargados de velar por los fieles de su parroquia.Por ello es aconsejable tratar a nuestros presbíteros como Don ó como padre seguido de su nombre de pila y/o apellidos. Demos como ejemplo a Don José Luis Repetto que además se le ha distinguido con el tratamiento de Monseñor.
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Como saludo es correcto hacer una ligera inclinación de cabeza, en señal de respeto, a la vez que se les da la mano.He querido dejar una ligera apreciación de cómo tratar a nuestro clero diocesano sin ahondar mucho en otras figuras que la Iglesia tiene, como son priores, abades y demás figuras que conforman el clero.