''El Vía Crucis de verdad'' por Andrés Cañadas

Jerez celebra este lunes el Vía Crucis de las Cofradías, una fecha que llega como siempre, marcada en rojo en el calendario emocional de los cofrades, por cuanto se convierte en una de las citas en la que todos los que vivimos y sentimos en clave cofradiera, participamos de manera común en un evento que nos une en torno a la Cruz de Cristo.

Por ello, y en vista de que el buen tiempo hará posible nuestra presencia en la calle -en esta ocasión junto a Cristo Rey- no debemos dejar pasar la oportunidad que de nuevo nos llega gracias al Consejo y en este 2018 gracias también a la Hermandad de la Borriquita, y debemos en la medida de nuestras posibilidades, participar en el acto que la Catedral nos propone a partir de las ocho de la tarde. Valdrá mucho la pena.

Y valdrá la pena, porque siempre es bueno callar en medio de tantos ruidos, y detenerse a reflexionar sobre los misterios que nos muestra el Vía Crucis. En un mundo fragmentado por tantos horrores y miedos, solo Cristo se convierte en la segura meta de las almas, pero no un Cristo a la carta al que solo recurrir cuando llegan las tormentas. De ahí la importancia de no faltar a esta llamada, acudiendo a nuestro primer templo como de verdad hay que acudir, esto es, con ganas de estar con Dios un rato, y no pasando de todo en cuanto deje de sonar el llamador. 

Lo de este lunes no es una procesión. Es algo más serio. A ver si somos capaces de darnos cuenta, lo cual nos vendría muy bien de cara al resto de Cuaresma que nos viene por delante.