''Rocío 2021: No... pero sí'' por Andrés Cañadas

Son varias las peñas que este miércoles de romería sin romería, han quedado para hacer juntos la primera comida de este nuevo Rocío sin Rocío. Son varios los romeros que este 2021 han elegido estos días de mayo para hacer sus caminos particulares... o para cumplir promesas ocultas de maneras diferentes... y así, son muchas las realidades romeras que ahora hacen de tripas corazón, porque el humo de las palabras se disipa tarde o temprano, y al final, la soledad y la pena termina por ganar la pelea, para devolvernos a la cruda realidad del tiempo que estamos viviendo.

Y el tiempo que estamos viviendo nos habla de caminos vacíos, de cielos sin cohetes, de Porvera sin manchas de cascos de caballos, de jacarandas que este año no serán cúpula para la carreta de nuestro Simpecado, y de todo lo que ustedes quieran, porque todos ustedes guardan miles de vivencias que este año volverán -otra vez- a quedarse ocultas y en silencio.

Publicidad

Es lo que nos toca. Es lo que la Virgen nos guarda este año, y es lo que nos hace vislumbrar un 2022 lleno de esperanzas, porque ese es el mensaje que este año tenemos que compartir: el de confiar en que ya estemos vislumbrando el final del túnel -ojalá- y la primavera del año próximo llegue envuelta en los sones del tamboril y de la gaita.

Miércoles de Romería sin romería. De Rocío sin Rocío, y de caminos sin Camino. Todo comienza en Santo Domingo, a las ocho de la mañana, al mismo tiempo que empieza a terminarse, deseando -qué tristeza más grande- que ojalá pasen pronto estos días... tan vacíos y tan opacos.

Quiera el Señor que este sea el último año así de nuestras vidas. Eso es lo que nos toca pedir a la Virgen, porque esa será la mejor señal de que ya se nos va terminando esta horrible pesadilla.

Publicidad

Publicidad