Santiago volvió a vivir su mañana de Corpus

La Solemnidad del Corpus Christi en Jerez, tiene todos los años una serie de procesiones sacramentales, que tanto en la antesala como en las semanas posteriores, siguen dotando de contenido a la verdadera presencia de Dios en nuestras calles. Hay quien se toma estas procesiones de manera muy seria, y acude a todas ellas con veneración y respeto. Hay quien pasa olímpicamente del Santísimo, porque no gusta de estas citas poco cofradieras. Hay quien se hincha a rajar de todas ellas en Facebook (que sí poca gente, que sí flores feas, que si la banda mala...) y hay quien pontifica constantemente sobre todo esto, en una clara creencia de estar en posesiones absoluta de la verdad sacramental, expresando opiniones que poco o nada favorecen el incremento de la devoción eucarística. 

Da igual. Si el columpio se mueve, es que hay alguien montado en él. Y esa es la única verdad. Así, que desoyendo a quienes tanto dicen querer a Dios en la distancia, la Hermandad Sacramental de Santiago abrió este domingo el ciclo de procesiones dedicadas a la Sagrada Hostia, con la que recorrió su feligresía, en una mañana preciosa llena de campanas y marchas eucarísticas.

La magnífica custodia de plata barroca fue de nuevo cobijo de Cristo Sacramentado, mientras la música llegaba un año más desde Medina Sidonia, y los mandos de los pasos correspondían a Martín Gómez y sus auxiliares, todo ello contándose con el acompañamiento de las hermandades de la parroquial, y también de algunas hermandades sacramentales, y con la presidencia de don Diego Moreno, párroco de Santiago el Real y de Refugio.