''Sesenta y cinco años de Defensión'' por Fernando Barrera Romero

Sesenta y cinco años han pasado desde que el 6 de julio de 1957 el anhelo de un grupo de jóvenes estudiantes con gran vocación cofrade se hiciera realidad: fundar una hermandad que diera culto al dulce crucificado al que tantos jerezanos se acercaban a rezar y a contemplar a través de un ventanal del antiguo Convento. Sesenta y cinco años marcados por los carismas de San Francisco y San Bruno, que tanto han influido en el espíritu de nuestra hermandad a través de los Hermanos Menores Capuchinos que han pasado por este convento y de los hermanos cartujos que pertenecieron a la comunidad de Jerez.

Sesenta y cinco años en los que la singular advocación de un portentoso crucificado que fue recibido en Jerez hace 227 años con honores militares ha imprimido a nuestra corporación un inconfundible carácter castrense. Sesenta y cinco años de la belleza cautivadora de María Santísima de la O, hermosamente vinculada desde nuestros inicios al colegio de la Compañía de María. Ha querido la Providencia que aun no pudiendo encontrarnos con Ella en su capilla por las razones que todos conocemos, hoy sintamos que la Esperanza de los niños lo es más que nunca, en un momento en el que vuelve a ser debate público una cuestión que debiera ser irrebatible: el respeto por la vida del concebido no nacido.

Pero no debemos olvidar que este patrimonio -devocional, espiritual, histórico- que ha ido conformando la identidad de nuestra hermandad, de nuestra cofradía, no hubiese sido posible sin los hermanos de la Defensión. Un valiosísimo capital humano que en forma de cariño, trabajo, dedicación, paciencia y sensibilidad, tantos hombres y mujeres han puesto al servicio de esta hermandad a lo largo de estos 65 años. A ellos queremos rendir hoy un sentido tributo, recordando especialmente a quienes ya nos preceden ante el Altísimo. Y mirándonos siempre en el espejo de nuestros hermanos venerables, personas de bien que con su ejemplo nos han ido marcando el camino. Camino que con la ayuda de nuestros Sagrados Titulares, debemos seguir señalando a las nuevas generaciones, a quienes dignamente hemos de legar la fecunda y bonita historia de la Hermandad de la Defensión.

Fernando Barrera Romero
Hermano mayor de la Hermandad de la Defensión

Publicidad

Publicidad